lunes, 27 de junio de 2022

Mendigo de amor

  

                                                                       LV

Por llenar el vacío que me habita,

me volví recipiente de tu anhelo,

me colgué de las nubes de tu cielo,

me sentí en tu jardín rosa marchita.

 

Por matar el hastío que me irrita,

me embriagué con el brillo de tu pelo,

me perdí tras el cebo de tu anzuelo

y bebí del rencor que en ti palpita.

 

Y a nadie culpo, no, ni a ti siquiera,

que de nadie es la culpa cuando el viento

arrastra tras de sí las hojas muertas.

 

Mas, llegando la nueva primavera

regresaré pletórico y sediento

a mendigar amor en otras puertas.

 

                                      Abril-2014