LVII
Escribir es un grito solitario en la noche
que libera la angustia que nos llega en el día.
Es consuelo de alma, es dejarla vacía
de pesares y miedos que incitan al reproche.
Escribir es entrega, sacrificio, derroche
de nobles sentimientos. Es tenaz valentía.
Es cubrir la tristeza, desnudar la alegría.
Es cerrar cada herida con poético broche.
Si por penas de amores afligido caminas
o sientes que la vida te golpea de lleno,
si tu mundo es tan solo un lugar entre ruinas...
…no lo dudes, escribe, ya febril, ya sereno,
y verás como al punto con las penas terminas
liberando tu alma del nocivo veneno.
Mayo-2014